domingo, 28 de septiembre de 2008

Capítulo 22: Hagan juego, señores

No estoy acostumbrada a jugar. Por eso no estoy acostumbrada a perder... Pero así es la vida. 
Y lo mejor de todo, es que me encanta poder asumir cualquier problema con una sonrisa en la cara. Estoy madurando ¿más? y aprendiendo a ser mayor. Nadie me dijo que fuera fácil, pero tampoco me dijo nadie que no había ninguna situación que no se pudiera superar. Eso es lo que más me gusta de todo, poder asumir mi propia vida.

Os dejo una canción que me gusta: Across the Universe
[...]Nothing's gonna change my world.



Words are flowing out like endless rain into a paper cup,
They slither while they pass, they slip away across the universe Pools of sorrow, waves of joy are drifting through my open mind, Possessing and caressing me. Jai guru deva om Nothing's gonna change my world, Nothing's gonna change my world.

Images of broken light which dance before me like a million eyes, That call me on and on across the universe, Thoughts meander like a restless wind inside a letter box they Tumble blindly as they make their way Across the universe Jai guru deva om Nothing's gonna change my world, Nothing's gonna change my world.

Sounds of laughter shades of earth are ringing
Through my open views inciting and inviting me
Limitless undying love which shines around me like a
million suns, it calls me on and on
Across the universe
Jai guru deva om
Nothing's gonna change my world,
Nothing's gonna change my world.

miércoles, 24 de septiembre de 2008

Capítulo 21: Sobre maridos y sofás


Quiero un marido. Si, hoy lo he decidido. Tambien quiero un sofá, rojo, o blanco, al ser posible. Lo he pensado hoy y me apetece.
Quiero amueblar un piso, el mío, aunque no tenga, o mejor dicho, y en relación al post, el nuestro.
No te pienses que me he fumado algo...que no es el caso. Todo viene por el catálogo de Ikea de la nueva temporada.

La cosa está en que todo es taaaan bonito, todo tan bien diseñado, que dan ganas de compartirlo. De tener una vivienda, de poner una mesita baja delante de la tele para poner los pies mientras comes palomitas en un bol morado con lunaritos y el churri te tiene cogida y apoyada en su pecho. Que tierna imagen. Me emociono y todo.

Y no porque no tenga churri, que no lo tengo, sino porque de aqui a que yo pueda tener el ansiado salón de mis sueños, puede ser que el  Guadalquivir comience a desembocar por Murcia (que hermosa eres...). Con eso lo digo tó!

No soy pesimista,  sino realista. Así que mientras espero sentada a que me toque la lotería, sueño con llegar a casa y que mi maridito me reciba con los brazos abiertos, me pregunte que tal fue el día, y me diga: cari, he visto una funda nórdica nueva que quedaría de lujo con las cortinas que te gustaron!

Eso si, puestos a pedir, que tenga coche. Mejor aún, que tenga tanto dinero que me lo regale cuando hagamos una semana de novios 

Hala! dicho queda!


jueves, 18 de septiembre de 2008

Capítulo 20: Editorial Candelilla

Creo que voy a tener que dejar de leer lectura femenina. Si, porque ésto no puede seguir así.

Voy por la calle, y cada pensamiento que dirijo, es como si estuviera escribiendo mi propio libro para que tú lo leas. Y créeme, es muy complicado, porque hasta intento no repetir las mismas palabras en una explicación mental.Punto y seguido. Para que no resulte redundante, incluso, me invento maneras y formas que queden bien en la estructura. Y lo peor no es eso, es que acabo con un estres, que no lo aguanto. Bajo doble espacio.


Voy pensando y analizando cada gesto de cada compañer@, cada mirada de "deseo" o de "odio", cada palabra que puedo decir y la repercusión que pudiera tener... en fin, voy redactándome!


Cierto es que cada uno desarrolla su vida según influencias cercanas. Quizás el tener toda la colección de Keyes, dado a la afición que mi padre me ha inculcado por la lectura, me haya podido afectar... El caso, es que sigo escribiendome, y esperando poder esquematizar un final que me guste. Punto y aparte.


Mientras tanto, voy a editar mi propia vida bajo mi sello. Y tú, si estás leyendo esto, es porque al fin y al cabo...algo te ha llamado la atención, ¿no?Prometo firmarte el primer ejemplar e incluso incluirte en las dedicatorias, eso sí,¿cómo te llamas, mi querido lector?


Punto y final.