miércoles, 31 de diciembre de 2008

Capítulo 36: Borrón y cuenta nueva

Hoy es el día de los propósitos: dejar de fumar, dejar de comer cual gochillo, hacer deporte, llegar puntual a los sitios, dejar de comprar cosas innecesarias... pero nos olvidamos casi siempre de los "mejores" propósitos: portarse bien con el prójimo, ayudar a quién lo necesite, escuchar cuando se nos pida, abrazar cuando alguien lo necesite, amar en el término más amplio de la palabra.

Último día del 2008, un año, cuanto menos intenso. Os dije que todavía quedaban días para que volveriera a sorprenderme, pues la historia se ha vuelto a repetir hoy, exactamente igual que el pasado día de Navidad. La diferencia, a parte de tres intensos días esperando lo peor (o en este caso, quizás lo mejor) es que estoy en Madrid, lejos de mi familia a la cuál no puedo acompañar.
Lo siento.

Año intenso, lleno de altibajos, más altis que bajos...Año de viajes, de socialización y amistad, de independencia, de nacimientos, muertes, bodas y bautizos. 
Año de ligues, de "falsos amoríos" y de ruptura de relaciones. Año (o final de año) de pasión, de locura, de amor
Año de cambio de trabajo, de estudio, de conocimientos adquiridos, de aprendizaje.
Año de actividades, de música, de ocio y entretenimiento.

Creo que no me arrepiento de nada de lo que he hecho, aunque si puedo pensar que hay algunas cosas que no las volvería a hacer. A quién le haya podido herir, le pido mis más sinceras disculpas, y a quién haya hecho feliz, aunque sea por un instante, le pido que no lo olvide.

El último post del año... Os deseo de todo corazón, que para el 2009 lo mejor de este año, sea lo peor de él.



"No concibo la vida sin risas, ni el amor sin llanto"