lunes, 24 de mayo de 2010

XII: Aquí

No me escondo si te digo que te quiero. No me escondo cuando hablo de ti.
Mi amor es grande, y va creciendo día a día. Porque me has devuelto la sonrisa, porque me has devuelto la alegría y la fe en el amor.

Pero tienes que saber que he vivido. Y he conocido, al igual que tú. Y mi pasado ya no importa, porque quiero empezar de cero contigo. Y mi pasado, se quedó ahí, porque ahora quiero forjar un futuro contigo.

Puedo querer a otras personas, mi amor es grande, me han enseñado a servir al prójimo, a poner la otra mejilla, y a escuchar aunque me hayan hecho daño.
Mi corazón es grande en el sentido que caben muchos otros corazones. Pero también es posible, porque gracias al tuyo, late más fuerte, y siento que siendo feliz soy capaz de hacer felices a los demás.
Nada tiene que ver mi amor por ti, con el cariño hacia otros. No entiende de sexos, ni de sexo; no entiende de razas, ni de colores, ni de formas de vida, ni de culturas.

Mi motor eres tú, y mi sonrisa la generas tú. Y yo lo comparto, porque la felicidad hay que repartirla. Y algún día, pronto quizás, lo haremos juntos, dará igual el lugar, la época, o quién nos mire. Dará igual todo, sólo importará que estemos juntos.

Si no tengo amor, nada soy. El amor, disculpa sin límites, cree sin límites, espera sin límites, aguanta sin límites. El amor, no pasa nunca.