jueves, 25 de diciembre de 2008

Capítulo 35: Largo final

Si pensaba que el año no podía más dar más de sí, me equivocaba. Todavía quedan seis intensos días, de los cuales, me puedo esperar cualquier cosa.

La última semana, antes de estas fechas es un alboroto para todos. Y si sobretodo vives fuera como yo, un disloque. Después de la cena de empresa, la cual dió bastante de sí y terminó como nunca me lo podría haber imaginado he vivido unos días intensos. Entre compras, trabajo y otras actividades de ocio,contaba las horas para bajarme a Jaén y descansar. Pero ahora mismo, los cuento para subirme y estar con una personita muy especial. 
La travesía Madrid- Jaén, se hizo insoportable. Serían las ganas de bajar del coche lo que me hizo que el camino se duplicara casi. Pero encontrarme con la familia hace que todo sea más llevadero y bonito.

Las ganas de preparar cosas, hicieron de ayer una Nochebuena como las de antaño, con todos los hermanos juntos, cantando villancicos y comiendo dulces caseros.

Pero la Noche, terminó de forma no tan bella. Hoy hemos vuelto del pueblo de darle el último adiós a una hermana de mi abuela. Fechas muy señaladas para todo, y un adiós así repentino marca también, sobre todo por los que quedan.

Aunque  como os decía, la ilusión de volver a Madrid y besar bajo el muérdago, hace que todo pase más deprisa. Así que aprovecharé a tope el amor de mi familia y mis amigos jaeneros, y cuando vuelva a estar lejos de aqui, aprovecharé todo el cariño que me dan mis amigos madrileños. La cuestión, es que pese a que quedan pocos días y puedan pasar muchas cosas pienso vivir amando todo lo que haga y pase.

Os deseo unas Felices Fiestas a todos