miércoles, 27 de abril de 2011

XXVI: El único fruto del amor

De mis cosas absurdas que normalmente me pasan, sí, digo normalmente, porque me pasan con mucha asiduidad, yo creo que la siguiente es la que más "en bragas" me ha dejado.

Un día, como otro cualquiera, voy al Super de mi nuevo barrio, que es muy fashion. Mi barrio, digo.
Nada más entrar, un tío, con una cara de, le faltan dos primaveras, y una bolsa de plátanos en mano, me dice:
-Perdone, ¿le puedo hacer una pregunta?
Y yo, ya sabéis que los raros son mi debilidad:
-Sí, dígame.
-Estos plátanos, ¿¿son grandes o pequeños??

¿Podeis imaginar mi cara?

-Eh.... Pues, depende de para que....
-Pero ¿son grandes, o pequeños?
-Hombre, para mí,(pequeños), pues no se, ¿¿medianos??
Respuesta neutra.
-Si los quiere más grandes, coja Bananas, y si los quiere más pequeños,seguro que hay más ahí.
-Gracias, gracias, los quiero más pequeños...
A todo esto, una chica que había en la caja, se partía idem....Normal.

Y esto, me da a mi que pensar.

¿¿Por qué nos gusta tanto hacer símiles con alimentos cuando nos referimos a otras cosas, como por ejemplo los órganos sexuales?? ¿Por nuestras ansias de devorar? ¿Por gula?
Os pongo unos ejemplos:
¿Por qué los pechos son, según tamaño, melones, peras o brevas? ¿Por qué no naranjas o melocotones?

¿Y por qué todo lo que sea, alargado, plátano, banana, pepino, los bollos de pan (de ahí el refrán, no tengo el horno para bollos) nos recuerda al miembro viril?
¿Por qué los labios, y me refiero a los de la boca, son de fresa, y pulpa del fruto de la pasión? ¿Acaso tienen pepitas? Porque lo de los pelillos, como la fresa, lo puedo entender, si la boca tiene bigotillo. Y respecto a
la fruta de la pasión, ¿la habéis probado? ¡Es asquerosa!una mezcla de limón con pepitas de sandía.

¿Por qué la piel es de melocotón? Seamos realistas, cuando tocas directamente un melocotón, te estas rascando durante un buen rato...
¿¿Y que me decís de la "piel canela"?? ¿Astillada y marrón? ¡Me estas diciendo tronquito??porque si nos ponemos así, también podríamos decir, piel color brea.... Que también está buena...
Pero ya no solo utilizamos similes comestibles en el sexo y/o/u romance. Porque si algo no vale nada, nos importa un pimiento; si no funciona, es una patata; si es aburrido o vas ebrio, es una castaña; si no se entera, es una empanada (mental); si es muy bueno, es la Re-pera( o la re-teta, según lo anterior mencionado); si un calcetín está roto, tiene un tomate; si te cabreas, le das una torta al otro; si te das un golpe, es una leche; y si
los pies te huelen mal, es a queso... Por no hablar, de cuando algo huele a bacalao, que ya sabéis a lo que me refiero.

Creo, que nuestra lengua es tan rica y variada, que se nos permite todo, y  lo que verdaderamente importa, es la entonación que le demos a la frase.
Pero eso si, no dejamos de pensar en dos cosas durante el día: en mojar el churro, y en
comer(noslo)
Hasta pronto, bombones.

El hombre es el único animal que come sin tener hambre, bebe sin tener sed, y habla sin tener nada que decir.

lunes, 25 de abril de 2011

(Inciso)

No me vale un mensaje, un chat, una llamada.
Maldita tecnología que es tu excusa perfecta.
Te echo de menos, necesito un abrazo tuyo.
Sigues siendo mi primer y mi último pensamiento del día.
Ven.
Te espero.
Con los brazos abiertos.
Con los labios sedientos de tí.

viernes, 22 de abril de 2011

XXV:La gran historia del Redecillo


Había una vez, una bella jovenzuela, que trabajaba en un departamento de reservas, feliz y ajena al mundo que le rodeaba.Un buen día, conoció a un muchacho, compañero de oficina. No era nada guapo,tampoco desagradable a la vista, pero tenía un buen cuerpo. De hecho, lo calificaría más tarde en esa categoría de "hombre-gamba" (le quitas la cabeza y te quedas con el resto).
Este muchacho, apodado el "Príncipe de Beukelaer" entre sus compañeras, parecía interesante, al menos simpático. Así que echándole morro, le pidió a la bella jovenzuela que si quería tomar un café con él.
-Está bien- dijo ella. - Quedaremos en un sitio céntrico el domingo por la tarde.

En esa primera cita, ella descubrió que tenía un punto payasete, y otro punto romanticón, a parte de un Mercedes Biplaza, descapotable y automático.

Como lo pasaron bien, decidieron quedar otra tarde para cenar. Estuvieron en un sitio muy bonito, y bebieron un vino muy rico. Al salir del restaurante, el "Príncipe de Beukelaer" quedó tan maravillado, que cogió la mano de la chica, y en mitad de la calle, le pidió si podía ser su novio.
Ella, un tanto sorprendida de su reacción, aceptó.
Pasaron los días, y se aproximaba el cumpleaños de ella. Había seleccionado un lugar muy especial para celebrarlo con gente muy especial. Entre ellos, un amigo de la juventud. Muy apuesto, por cierto.
Lo pasaron todos muy bien, pero cuando la noche terminó, el verdadero carácter de él, empezó a mostrarse. Que si le gustas a tu amigo, que si no me haces caso, que si todos te miran....
Ella, que ya sabía lo que era soportar a un cansino de ese tipo, empezó a pensar en qué tenía que hacer... El mismo día que cumplía sus 23, y tras una "cutrecena" del chino en una casa de un amigo de él, en plan ocupa,mientras que él se trincó una botella de vino del caro del dueño de la morada, ella recibía una llamada, que ponía el punto y final a la decisión que en breve tomaría.

Así que tres días más tarde, y tras consultarlo con el consejo de "amigos sinceros y desinteresados", decidió quedar con él, el cual se presentó a la cita con una bolsa de viaje, con su tupper y su bolsa de aseo para quedarse con ella a dormir:
-Mira, creo que nuestros caminos van por senderos distintos, y tu forma de ser no encaja con la mía. Creo que mejor lo dejamos aquí.
-¿Me estás dejando?
-(Interpreta lo que quieras, pero sí)...Eh.. sí.
-Pero yo estoy enamorado de tí!
-Pero yo no, y no quiero seguir.
-Pues si no te tengo como novia, no te quiero ni como amiga!
-Bueno, pues ya está....
-Pues ahora no se como volver a casa...
-Cógete el metro, que todavía llegas.
-Sí, y que le digo a mi madre....que vuelvo ahora...
-Ehm.... bueno, va, quédate si quieres a dormir.

Hasta aquí, más o menos, la historia, sin ver al personaje, toma un rumbo más o menos normal. Pero, la gran historia del Redecillo, comienza a partir de este momento.

La chica, mona ella, con una batita de boxeador, decide ir al baño antes de acostarse:
-Cuando ya no quieras esa bata, dámela, que me encanta!
(Primera cara de asombro)
La chica, (segunda cara de asombro)que sale del baño se encuentra con esta imagen:

Él, en calzoncillos, metido en la cama, y, haciendo realidad los rumores de la oficina, con UNA REDECILLA EN EL PELO, para no despeinarse la melena morena.

La cara de expectación de la chica, podréis imaginar, empezó a cambiar en el momento que el ataque de risa, comenzó. Hasta tal punto no pudo aguantar la risa, que finalmente, tuvo que quitarse la red, o salir de la habitación.

No contento con eso, por la mañana temprano, cuando se marchaba, aún consiguió hacer reír más a la chica: sacó de su bolsa un cepillo de rulo, y un litro de colonia de lavanda.
Ese fue el último día que lo vio. En una semana, fue despedido.

Y colorín colorado, este post-cuento, se ha acabado.

P.D: no preguntéis por qué la chica tiene un don especial para hacer sentir a los bichos más raros que son normales. Pero también tiene el mismo don para darse ella misma cuenta de que no lo son, y dejarlos.





domingo, 3 de abril de 2011

XXIV: Títulos para una noche de sábado

Una fiesta de cumpleaños, si sólo conoces al anfitrión puede ser aburrida, salvo que seas una persona muy extrovertida, bien por defecto o bien por que bebas tanto que te salga de manera "natural". Aún así, cuando ves al anfitrión contento, eso también se contagia e inunda de buen rollo a los demás participantes.

Así que lo mejor, para quedar bien y además pasarlo mejor, lo ideal es contar con otra amiga que te acompañe.
Claro, que la noche puede ser tan especial que se estire, estire, estire....y de pronto empiecen a suceder cosas que la nominen. Eso, también puede pasar, si y desde temprano, ya empiezas con, permítanme la expresión, el chomineo con el chat del teléfono.

Digamos, que podemos resumirlo en estos títulos:

-En este vagón solo hay o gays o feos. -No te quejes, en el mío solo hay panchis o kinkis...
-Bailando con Mr. Bean
-Estamos rodeados de Mocedades
- No sin mi Australiano
-Quiero ir al Congo
-¿Tu eres gallego?
-Maite y María descubren su vocación secreta: monologuistas.
-Allí abajo en la mina: a pico y pala
-Cuando María conoció a Pepe
-El mentalista
-Los grifos cada vez los hacen más modernos
-Que tío más largo... como lo tenga todo igual....
-Los cojones 33: no hablo mejor inglés cuando voy borracha
-Como me hagan pasar por un detector de metales, no se que coño voy a hacer con el abrelatas
-Despedida a la semifrancesa: adoro a los taxistas oportunos
-Tengo hambre[...]A las cinco de la mañana, te comes lo que sea
-Me quiero poner el cinturón, pero no encuentro el agujero
-No me gusta el tricornio. -Pues que te enseñe la porra
-Perdona ¿buscas algo?. -Perdona, tu amiga tiene un problema....

Así, no tiene mucho sentido. Pero os puedo asegurar que anoche, fue una de las mejores de mis salidas nocturnas en Madrid.





sábado, 2 de abril de 2011

XXIII: Fresas con nata

La inspiración viene en cualquier momento. Fluye, emana de la nada, y crea el todo. Aparece cuando el animo, el bueno, brilla por su ausencia. Pero no siempre pasa lo mismo. No todo son penas en ese estado.
Mi inspiración ha venido en un bol de fresas, con nata, por supuesto. Y es que hoy, tal día como hoy, hace un mes, comenzaba una etapa de crisis. Crisis, como cambio, no de esa manera peyorativa que tan quemada está últimamente.

Mis cambios, muchos.Pero, hoy, con cada bocado a una fresa, y como siempre con mi música de fondo, me dejo llevar por el buen gusto de las circunstancias que he pasado.
Cosas, causas, cuanto menos inesperadas. Aún así, me doy cuenta de mi capacidad de superación y asimilación.
Dejar una relación, siempre tiene su doble sentido. Uno, para el que es dejado, y otro, para el que deja. En mi caso, el segundo, siempre te quedas con una idea superflua y materialista de que el que es dejado se va a arrastrar y decirte que no te puede olvidar y que vuelvas con él.
Como esto no es así, automáticamente, el corazón unido a un instinto de supervivencia natural, busca otros medios de soporte y consuelo.

Y ahí es donde empieza el juego. Amigos, fiestas, cosas que hacer, cosas que comprar y que organizar en una nueva vivienda. Viajes, eventos varios... y más gente nueva. Espectáculos, presentaciones, cafés y chats.
Rápidamente, el consuelo hace su efecto, y el corazón vuelve a crear su coraza, una capita más de pintura, un aislante más bueno.

De pronto hallamos nuevos besos y abrazos, que cumplen su función en un momento dado. De nuevo esa sensación de, que bien sienta tu calor, que bien sienta apoyar mi cabeza en tu hombro.

Pero no nos engañemos, cada uno cumple un papel en un momento dado en la vida de otra persona. Al final de la nuestra, hemos sido actores de una gran obra, o de muchas. Algunos, sobreactúan para que no le influya su mismo papel, y así consiguen aparentar que no sufren. Otros, simplemente, nos dejamos llevar por la espontaneidad, aunque parezca lo contrario.

En una misma semana, tres personas distintas me han dicho que nunca han hecho nada a disgusto conmigo, que soy una persona difícil de olvidar, y que tras mi sonrisa de niña buena, escondo una mirada malvada.
Pero yo sigo siendo la misma, ¿no? o si influyo de manera tan distinta en cada una de las personas que me rodean, habrá un momento, en el que no sepa que papel toque hacer, me equivoque de guión, y meta la pata. Es por ello, que (a una cuarta persona, le digo) analizo todo, cuanto pasa, y cuanto pueda pasar, pues, de lo único que estoy segura, es que se puede ser espontáneo y a la par, adelantarse un poco a los sucesos, para que nadie del grupo sea dañado.

Me encantan las fresas con nata. Realmente, te lo estoy diciendo con mi mirada maligna, y mi sonrisa complaciente.