En mi trabajo diario de
Reina, sufro ataques de seguidores anónimos que me paran a la salida de los hipermercados y se postran ante mis pies.
Y es que lo que no me pase a mi, que sepais que no existe.
Porque, a los hechos me remito: viernes después del laburo como dirían del ecuador para abajo, voy a comprarme un ventilador al Hipercor, por motivos obvios del verano (que por cierto, lleva haciendo fresquito tres noches seguidas, #@€~€&/() Murphy!!!! )
Salgo, pensando en una conversación previa que había tenido, yo en mi mundo como de costumbre, y un personaje con ojos que se me planta delante. "Ya me va a vender algo", es lo primero que pienso. "No, se habrá perdido". Pues tampoco.
-Disculpa- me dice el chico (30 años, mediana estatura, posiblemente faltusco y más solo que la una)
-¿Sí?- respondo con total tranquilidad.
-Nunca acostumbro a hacer esto, pero es que te he visto salir, y me he dicho, no puedo permitir seguir viviendo sin conocer a una reina como tú.
-¿Perdona?-empecé a fliparlo ¬¬
-Imagino que te lo habrán dicho más veces, pero es que eres guapísima
-Si, es un agobio ser como yo, me paran por la calle, me esperan en la puerta de mi casa, la gente no deja de echarme fotos....
-Jejeje! encima graciosa. Y a parte de tus labores de Reina, ¿a qué te dedicas?
-Salvo el mundo de 8 a 3, porque ahora tengo jornada de verano. Por las tardes, me dedico a planear la conquista del mismo.
-¿Y, vas a coger el autobús?
-Bueno, más bien, pretendo montarme en él.
-Y , ¿de dónde eres? porque por tu acento, diría que de lejos,¿no?
-Sí, del mismo Jaén Capital.
-Anda! yo tengo familia en Linares (si es que de Linares tenía que ser*)
-Ahm.... que bien...(autobús, ven YA)
-¿Me regalas una mirada?
-(cara de mala hostia, lo miro)
-Pues, yo es que te he visto, y de verdad me has encantado. Ahora me tengo que ir, pero no se si te gustaría que siguieramos la conversación tomando un café... O lo dejamos al destino.
-Es que no suelo hacer esas cosas
-¿El que? quedar para tomar un café con chicos?
-No, con chicos no(a punto estuve de vacilarle y decirle que me iba el rollo bollo). Con desconocidos
-Bueno, pero igual que si me hubieras conocido en una discoteca, o en un pub...
-Mejor, dejemos que el destino decida( y con la suerte que tengo, no te vuelva a encontrar en mi vida).
-¿Me regalas una sonrisa por última vez? Me ha encantado conocerte.
-Ehmm... si, si, igualmente...
Tengo un a capacidad para atraer a la gente más rara del mundo mundial, que ¿es para contarlo o no?
Si es que quién me bautizó como
Sucubus, tiene toda la razón del mundo. Porque ya veis, otra de mis labores de reina, es ir seduciendo a todos los hombres, y una vez que son míos, me quedo con su energía, su dinero, sus pertenencias y después los dejo agonizando.
(*a mis amigos de Linares, permitidme esa frase, bien sabeis que es simplemente un dicho)