viernes, 26 de octubre de 2012

Proyectos, ideas, clases...

Hace mucho tiempo que no paso por aquí a escribir, por varias razones: estoy manteniendo la web www.candelillawax.es y también tengo menos tiempo. Pero hay otras razones extrínsecas a mi, por las que me he "alejado" un poco más de la escritura por este medio. Ya sabéis, gente envidiosa y cotillas por doquier.

Pero me quiero centrar en el tiempo. Cuando el verano se acabó para casi todo el mundo, a primeros de septiembre, para mí lo empezó a hacer de manera imprevista. Me fui de viaje a mi tierra, y cuando regresé a casa, todo, y cuando digo todo es todo, había cambiado. Y para bien. Para muy bien.

Me volví a encontrar en mi esencia, tal y como soy yo. No se si las palabras de unos amigos sirvieron, o fue un cúmulo de circunstancias, el caso es que el tren volvió a sus vías.
Y de pronto, de la noche a la mañana, me encontré con mil cosas por hacer. Cursos, escuelas, gente por conocer, actividades, días más cortos, y el apoyo de mi pareja, por supuesto. Y aquellos días que me parecían interminables, que ansiaba no estar sola, y que no tenía nada que hacer, han tornado, y ahora me faltan horas para hacer todo lo que tengo entre manos.

Lo más importante del cambio, ha sido la idea de la puesta en marcha de un proyecto. No os puedo contar de lo que va, hasta que no sea "legalmente" mío. Pero todo proyecto nace de una necesidad, y ahí estaré yo para cubrirla.
El caso es que no sólo tengo apoyo interno, que es muy importante. Si no que mis tutores están convencidos de que es una muy buena idea. Así que, como si fuera una bolita de plastilina, estoy dándole forma para que quede perfecta, y cada vez, es más grande, y más bonita. Y de nuevo, mi seguridad vuelve a crecer.
Porque cuando nos alejamos de lo nuestro, de lo que creamos un día, el ánimo disminuye, la seguridad, merma, y somos tan vulnerables, que llevamos a los extremos cualquier situación. Y aunque seamos conscientes de que esto pasa, tenemos que ser también conscientes de que solos no podemos superarlo.
Yo  me encontré con un cambio muy importante para mí. Y he sabido adaptarme. No sobreviven los más grandes, ni los más fuertes, sino los que mejor se adaptan a la crisis. Que no se os olvide nunca.




No hay comentarios: